Mayores de 65, bajo la lupa
En este caso la DGT había puesto en su punto de mira a los mayores de 65 años, a los que además de llamar ‘viejenials’ en uno de sus artículos, había criminalizado como fuente habitual de accidentes.
Se trata de una actitud edadista que algunas asociaciones han denunciado incluso en las señales de tráfico que plantea poner en funcionamiento la DGT este mismo año, donde se ilustra a los mayores de 65 años como ancianos inválidos que andan difícilmente sirviéndose de un andados o bastón.
Desprecio
Pese a que la legislación actual en materia de renovación de carnet de conducir ya es más restrictiva que la de muchos países europeos y obliga a renovar el carnet de conducir cada cinco años a partir de los 70, cuando en otros países se mantienen 10 años de validez, la DGT planteaba reducir las renovaciones a dos años.
A efectos prácticos esto significa que a partir de los 65 se otorga una única renovación por cinco años y a partir de entonces las renovaciones son cada 24 meses y con un examen que se llegó a plantear que fuera más riguroso que para los conductores normales.
Fuente: El debate.com
¡ES NECESARIO UNA RESPUESTA MASIVA ANTE ESTA AGRESIÓN!
La DGT califica de “viejunos” a los mayores de 65 años y mantiene una agresiva campaña de discriminación contra ellos.
Las medidas discriminatorias que intenta imponer la DGT para la renovación del carnet de conducir a mayores de 65 años atentan gravemente contra la dignidad y la igualdad de ese sector de la ciudadanía. Lamentablemente, no nos sorprende esta nueva agresión edadista. Era de esperar un paso así por parte de un estado que promueve y alienta la discriminación por edad, al tiempo que halaga, engatusa y soborna el voto joven con ofertas de privilegios. El Defensor del Pueblo, por su parte, ha demostrado ser una institución inútil e incompetente a la que no sirve de nada recurrir ante una agresión discriminatoria de esta magnitud.
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